Desde hace mas de 20 años se establecieron los Debates sobre el Estado de la Región en La Rioja, trasponiendo una práctica parlamentaria del Congreso de los Diputados. Cada época tuvo su incidencia y su influencia y posiblemente su utilidad. Después de varios años entrado este siglo, y tras ver el ultimo debate de esta legislatura autonómica, me cuestiono si esta práctica parlamentaria tiene su utilidad publica o social.
El debate es concebido fundamentalmente como un acto mediático, no importa la información, no importa el constaste de ideas, solo importa lo que se va a publicar al día siguiente. Y esto obliga a tener preparado los temas, mejor dicho hasta los "titulares" que aparecerán en los medios de comunicación.
Los medios de comunicación, con la que les está cayendo, de crisis económica y dependencia de un clientes, el sector publico, de su cuenta de resultados tienen que buscar un cierto equilibro en las noticias que publican, no pueden hacer análisis riguroso con datos, que pueda perjurdicar a quien gobierna, pero también respetan a la oposición porque gobiernan en otras administraciones publicas, ayuntamientos, que también son clientes y aportan contratos a rentabilidad de la empresa editora.
Asi pues que tenemos un Debate, de monologos, en distintas ondas que no se encuentran argumentos solo para la descalificación, que a veces se remontan a los albores de 1995 e incluso a la Expo del 92, cuando hay toda una generación de personas que ni se acuerdan ni han conocido otra política que la del actual Presidente de la Comunidad.
Creo que esta practica parlamentaria ha dejado de ser útil por varias motivos:
1.- No tiene Utilidad económica, política o social.
Los acuerdos que influyen en la vida de los riojanos se pactan en otras instituciones tales como Comisiones Bilaterales con el Gobierno de España, Acuerdos y Convenios, Consejo de Política Fiscal y Financiera, Comisiones Sectoriales de Consejeros, las propias derivadas de los pactos sociales, que son donde se definen políticas, y se asignan recursos económicos. Tambien influye el liderazgo y la visión que debe dar a esta institucion el Gobierno, como maximo responble politico, que siempre viendo la actividad como un "trámite", a veces engorroso que hay que pasar. En general el debate parlamentario no consigue cambiar ningun propuesta que se haya acordado en otras instituciones con menos representatividad.
Al final el Parlamento pese a ser la máxima representación de los ciudadanos, elegidos por sufragio universal, se queda como una entidad sin función, sin vinculación con la realidad riojana y con una cierta imagen que solo sirve para que los políticos se entretengan.
2.- El incremento de desprestigio de los políticos.
Los usos parlamentarios, en general, se han degradado ya que el lenguaje, críptico que se usa, la descalificación como método, la ausencia de un debate de preguntas y respuestas, y la casi falta de contenidos con impacto real en los ciudadanos, hace que el parlamentarismo y su practicas contribuyan en general a aumentar el desprestigio de los políticos.
3.- El maniqueismo politico llevado al extremo en estos debates donde la culpa de todos los males de nuestra región es ZP, y nadie tiene responsabilidad sobre nada y nadie. La excesiva teatralidad e impostación de este argumento hace que los discursos suenen a falsos e hipocritas cuando hace dos años el argumento era el inverso.
Creo que estas razones nos deberían hacer pensar el uso y la practica parlamentaria en el Siglo XXI, estamos ante una próxima reforma del Estatuto, convendría también tomar conciencia de todo esto y proveer de nuevas practicas parlamentarias mas acorde con nuestra realidad y con impacto en los ciudadano.
