sábado, 26 de diciembre de 2009

Al Rey no le gusta el pais que reina


Todos los años el Rey de España, en Nochebuena, dirige su mensaje. No voy a entrar en el contenido del mensaje real, pues desde hace años los considero un producto televisivo mas, previo a la aparición de los humoristas que nos entretienen la noche televisiva, mientras andamos entre el fogón y el comedor, preparando la cena. Sin embargo si voy a entrar en las interpretaciones y editoriales que le dedican los días posteriores. La fecha en que se realiza y la casualidad, buscada o no, de que a esa hora todas los medios audiovisuales lo emitan, y que al día siguiente no hay periódicos, ni periodistas, hace que se magnifique el discurso y se produzcan reacciones políticas y sociales curiosas. Este año tiene la ventaja que el discurso televisivo real ha ganado mercado de audiencia, en Euskadi, se emite por primera vez desde hace mas de 30 años. Hay una linea que dice que ha sido pegado a la realidad y ha dado un tirón de orejas a los políticos, me pregunto si el Rey no es un cargo político, no electo, pero es el primero de todos ellos, el del Jefe del Estado, por lo tanto había que reintrepretar el discurso diciendo que el mensaje del Rey ha dado un tirón de orejas a los "partidos". No es función del Rey dar tirones de orejas a los partidos políticos, no tiene autoridad para ello, vivimos en un estado democrático y en un estado democrático, la autoridad emana del pueblo que se manifiesta a través de las urnas, en las elecciones, aunque su cargo, el de Jefe de Estado, no sea elegido, su forma de actuar debe regirse por el respeto a la voluntad del pueblo. Que el Rey diga lo mismo o casi lo mismo que lo que dice el Gobierno elegido por el Parlamento democráticamente, eso es lo constitucional; peor seria que el Rey dijera lo que la dice la oposición, es decir que pusiera la voz a quien el pueblo no se la ha dado.
No magnifiquemos la figura del Rey no tiene ninguna autoridad "divina", ni venida de la "historia", hoy su autoridad y estatus viene de la Constitución y esta deja muy claro cual es su papel. No esperemos el discurso como si fuera el Oráculo de Delfos de los griegos o romanos que esperaban la "voz divina" antes de tomar decisiones, no es eso. El mensaje de un rey en una monarquia parlamentaria es, debe ser y estar en sintonia con la opinion del Gobierno democratico de España, sea cual sea. Si no tendremos la impresion que tengo oyendo comentarios y editoriales, que al Rey no le gusta el pais que reina. Si fuera cierto es ya sabe donde esta la puerta de salida.

Image¡n del Monte Parnaso
Considerado por los griegos como morada de las Musas y de Apolo, el
Monte Parnaso (o Parnassus) es la patria simbólica de los artistas. En la mitología griega, Parnaso fue hijo de Poseidón y de una ninfa, responsable de la fundación del oráculo de Delfos, que luego fue ocupado Apolo, quien provenía del monte Helicón.

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