viernes, 31 de octubre de 2008

Economia ,Fraude y Resignación





A raíz del 11-S y las guerras posteriores que comenzaron en este siglo provocaron un fenómeno curioso en la opinión publica hubo intento de hacer un "encanallamiento" de los ciudadanos presentando una especie de "actos convencionales" alejados de la realidad, argumentos como "armas de destrucción masiva", " impulsar la democracia en Oriente medio", "tendremos petróleo mas barato", "España está por primera vez en el mundo" etc., todo ello era engaño y falsedad, calaron en un parte de la sociedad mundial y también española. Esta cultura del engaño también se extendió al mundo económico, tanto los políticos como los medios de comunicación han metabolizado los mitos del mercado, como que las " grandes corporaciones empresariales trabajan para ofrecer lo mejor para el cliente" o el público, que la " economía se estimula si la intervención del Estado es mínima" o que las grandes diferencias salariales y el enriquecimiento de unos pocos son subprocesos del sistema que hay que aceptar como males menores. Es decir que nos hemos rendido totalmente ante el engaño y hemos decido aceptarlo. Pero la realidad es que el mercado está sujeta a una gestión que financian y planifican cuidadosamente las grandes corporaciones empresariales. Éstas, por otra parte, ni están al servicio del consumidor, ni las controlan sus accionistas, sino los altos ejecutivos, que han desarrollado una compleja burocracia, ejemplo, Telefónica y el BBVA en epoca de Aznar, responsable de escándalos financieros como los de Enron, Wordlcom, Arthur Andersen, Seguros AGI, Lemman Brothers, los bancos islandeses e ingleses, etc, la lista es larga e interminable. La distinción entre el sector publico y privado cada vez tiene menos sentido porque las grandes grupos empresariales son quienes influyen en las administraciones publicas, gestionan contratos de obra publica, los gastos generales, vemos como se concentra en pocos grupos los servicios públicos externalizados, en definitiva como se apropian del dinero publico. Pero lo que mas me repugna es como la sociedad acepta con resignación esta situación que cambia y manipula a su gusto la verdad y enaltece la especulación como fruto del ingenio, la economía de libre de mercado como antídoto para todos los males del mundo y a nivel internacional se fomenta la guerra como el gran instrumento de la democracia.

1 comentario:

cibersocialista dijo...

Es la verdad,toda la verdad y nada más que la verdad. El socialismoe no puede...no debe conformarse con gestionar el Capitalismo. Hacen falta ya otras estructuras, otras ideas y rebeldía.
Nadie lo va expresar mejor Jose.
No bastan controles, hacen falta cambios y bastante radicales. Si al final vamos a pagar todos por lo menos que sea nuestro lo que estamos pagando.